Ledesma es una empresa agroindustrial argentina con 116 años de historia, líder en la producción de azúcar y papel. Además, cuenta con una importante participación en los mercados de frutas, jugos y aceites, alcohol y bioetanol, carnes y granos. Su complejo agroindustrial se encuentra en Jujuy, donde tiene más de 40.000 hectáreas destinadas a la cosecha de la caña de azúcar y donde trabaja también la mayor parte de sus casi 6.000 colaboradores.
“En mayo empezamos la zafra, con una expectativa superior a la del año pasado porque tuvimos mejores lluvias en primavera y verano que el año anterior. Las precipitaciones todavía no alcanzan los registros históricos, pero sí están mejor que en 2023. Otro factor climático que tendrá consecuencias sobre esta cosecha es la helada de julio. Tenemos entre 300.000 y 350.000 toneladas afectadas que tenemos que cosechar en los próximos 20 días, de todos modos en nuestro plan de cosecha ya estaba entrar primero en las zonas con mayor probabilidad de helada, de lo contrario el daño habría sido mayor. Además, en los próximos 15 días tendremos más información sobre el rendimiento de la caña afectada y posible disminución en la producción”, comenta Eduardo Nougués, Director de Asuntos Institucionales y Legales, que además estima que la zafra podría terminar a principios de noviembre.
Ledesma es reconocida por el respeto y el cuidado del medio ambiente. “En 1975 donamos 76.000 hectáreas para la creación del Parque Nacional Calilegua. En 2005, iniciamos una alianza con la Fundación ProYungas y trabajamos conjuntamente con ellos en un proceso de revalorización de los bosques nativos en las 157.000 hectáreas que tiene la Compañía en Jujuy, y logramos el primer ordenamiento territorial realizado por una empresa privada en la Argentina. Asumimos el compromiso de conservar dos hectáreas de bosques nativos por cada hectárea en producción. Como resultado de este trabajo, que sirvió como antecedente para la sanción de la Ley de Bosques en la Argentina, preservamos 100.000 hectáreas, que equivalen en superficie a 5 veces la Ciudad de Buenos Aires. Además, a partir de 2010, llevamos adelante junto a ProYungas el programa Paisaje Productivo Protegido. El principio que rige esta iniciativa es que una actividad productiva no necesariamente es una amenaza para el ecosistema en el que se desarrolla, sino que puede ser incluso garantía de su preservación. Además, quiero destacar que más de la mitad de nuestra matriz energética proviene de fuentes renovables”, detalla Nougués.
En cuanto a los proyectos para el año que viene, adelanta: “Estamos construyendo una Planta de Pulpa Termomoldeada, que comenzará a funcionar en unos meses en el Parque Industrial de la Compañía en Jujuy. Allí comenzaremos a producir vajilla descartable a partir de la fibra de la caña de azúcar. Los envases de pulpa termomoldeada representan una alternativa sustentable al plástico de un solo uso, ya que son reciclables, biodegradables y compostables”.